Debate «Soterramiento de las vías en Valladolid»

José Trigueros: “La inversión económica no debe ser una traba para elegir el mejor proyecto urbanístico. Primero hay que elegir el modelo de ciudad y después ver cómo construirlo”

La Asociación de Ingenieros de Caminos Canales y Puertos y de la Ingeniería Civil, organizó la jornada “El soterramiento en Valladolid, a debate” que tuvo lugar el pasado 25 de noviembre en Valladolid para abordar las posibles soluciones al soterramiento de las vías en la ciudad.

La sesión, moderada por el arquitecto Lorenzo Dávila, abordó un tema de máxima actualidad en la ciudad porque, como afirmó, las vías del tren suponen “una herida para la ciudad que la separa en una zona amable y noble y otra zona oscura”.

José Trigueros, presidente de la Asociación de Ingenieros de Caminos, comentó que Valladolid es una ciudad ferroviaria desde su existencia y que tiene que agradecer mucho al ferrocarril. “En este momento, el ferrocarril ha quedado inmerso dentro de la ciudad, pero hay que hacer todo lo posible por adaptarlo al nuevo urbanismo del S.XXI”, dijo.

Además, señaló que en vistas de futuro “hay que observar hacia donde está creciendo la ciudad y elegir qué proyecto de ciudad es el mejor para sus ciudadanos”. Respecto a la financiación afirmó que “se puede obtener de varias formas como los Fondos Next Generation, financiación privada, por parte de los ciudadanos…” primero hay que debatir cual es el mejor proyecto y después las otras cuestiones.

Víctor Maceiras, Ingeniero y autor de un informe sobre el soterramiento apuntó que “no hay un estudio informativo sobre el impacto del soterramiento de las vías en la ciudad y explicó que las obras de infraestructuras suponen un coste pero que estos costes se recuperan siempre, ya que por cada euro invertido se genera empleo, cotizaciones,  impuestos y revierten al Estado entorno 0,60€ por lo que se genera riqueza”.

En este sentido, Maceiras señaló que las obras ferroviarias son las que más riqueza generan y que el optar por el no soterramiento «al final, ha sido una decisión política. Se habla de que es un proyecto financiero, pero con la situación actual, se podría resolver incluso con fondos europeos o incluso modificar el convenio para reducir la parte que le correspondía al Ayuntamiento», señaló.

El representante de la plataforma de vecinos por el soterramiento, Cecilio Vadillo, aseguró que les gustaría que el Ayuntamiento liderara este tipo de proyectos de ciudad, tal y como se ha hecho en otros municipios del país, de diferentes signos políticos y subrayó que el proyecto de Valladolid depende de la voluntad política que, por desgracia, no existe.  

El urbanista Javier Ruiz, comentó que está seguro de que “dentro de 30 años no van a existir automóviles privados pero el tren seguirá aquí, aunque no puede aparecer al mismo nivel que los viandantes y eso hay que empezar a trabajarlo”

Ruiz también dijo que, en Valladolid, y otras ciudades ha sido necesario crear muros para aislar el tren de alta velocidad. “En el caso de Valladolid no es un muro solo funcional, sino que crea la separación entre las dos partes de la ciudad que crea una diferencia también económica entre los ciudadanos lo que crea una frustración tremenda entre los ciudadanos”, dijo. La jornada concluyó con el deseo, tanto de los participantes como del público de que se analicen bien todas las opciones a la hora de decidir sobre el soterramiento o no de las vías.